RAMÓN DÍAZ DEL MORAL II

Desde que pusimos la entrada sobre este tipo (ver), no dejan de llegarnos comunicaciones de gente estafada por él. Algunos han dejado comentarios y otros se han dirigido a nosotros personalmente.
Lo único que podemos sugerir a los afectados es que le denuncien. Es de esperar (o de desear, más bien) que algún juzgado se dé cuenta de que la estafa es la ocupación profesional de este hombre y que lo meta en la cárcel. Cobrar, es casi seguro que no cobraremos, pero se puede evitar, quizá, que siga estafando a más gente.
Eso sí, aunque sea mañana cuando lo metan en prisión, uno no puede dejar de mostrarse perplejo ante la continuada impunidad de un individuo que, necesariamente, ha de acumular varias denuncias y sentencias condenatorias.
Si has leído esta entrada antes de entablar negocios con él, enhorabuena. Si ha sido después, lo sentimos enormemente.